¿Desistes de repetir problemas y creas proyectos?

Nos acostumbramos a vivir con problemas o a hacer de todo un problema, más bien. ¿Y si vemos nuestra vida como una innovación continua, como un proyecto creativo en progreso?

Comienzo de sesión.  “¿Cómo estás?” pregunto.  “Muy tranquila.  La verdad es que estoy muy bien.  Debería mover las cosas un poco”, me responde sonriendo.  “Mientras no sea creando problemas”, le digo.  Y nos reímos juntas.

Nos acostumbramos a vivir con problemas o a hacer de todo un problema, más bien.  Vemos la vida como una serie de obstáculos a sortear o de batallas a ganar.  En este paradigma guerrero y patriarcal que heredamos, cada situación es considerada como una dificultad que debe ser planificada y atacada.  Generalmente, no nos damos cuenta de esta mirada sobre la existencia, pero nuestro lenguaje está lleno de metáforas militares: ser un guerrero, luchar la vida, ganarle a la enfermedad, tener armas para defenderse, estar fogueado, poner el pecho a las balas; referirse al otro como enemigo, como adversario. Y así salimos, como soldados inexpertos cada mañana…

Comúnmente, seguimos los lineamientos del Estado Mayor: la sociedad.  De acuerdo al modelo imperante en cada una, nos dejamos llevar casi pasivamente, sin preguntarnos si corresponde a lo que somos o a un deseo interno.  Así, trabajamos en lo que hay o lo que conviene, nos casamos y tenemos hijos, vamos de vacaciones adonde está de moda, nos vestimos como procede, etc.  Cuando despertamos… estamos en problemas…  Y, en lugar de reflexionar y simplificar, tendemos a acumular más problemas: nos quejamos, nos deprimimos, nos rebelamos, nos resignamos.

Así se inicia: una chica de veinte años se lamentaba de que no sabía qué estudiar y que “debía” tener claro qué quería y tener una carrera y encontrar un novio y casarse y…  La detuve y le dije: “La juventud es para explorar, para equivocarse, para tener experiencias, para probar alternativas, dentro de ciertos cuidados lógicos.  Lo que no hagas ahora lo vas a querer hacer a los cuarenta o cincuenta.  Vas a vivir cien años.  ¿Para qué  apurar las cosas y hacer lo que se espera en lugar de lo que descubras que es esencialmente tuyo?”.

camino de luz

La sociedad nos bombardea con múltiples ofertas y reclamos y los adoptamos sin pensar en lo que significan en términos de tiempo, dinero, capital emocional, frustraciones personales, responsabilidades, etc.  Pasamos la mayor parte del tiempo creando y luego solucionando problemas repetitivos, ineficaces y reactivos. 

¿Y si vemos nuestra vida como una innovación continua, como un proyecto creativo en progreso, como una concreción de nuestros mejores sueños, como un aprendizaje constante, como una evolución hacia la plenitud, como una obra de arte en ejecución, como una condensación de dualidades aceptadas, como un Uno integrado en este aquí y ahora, como un deseo del Alma, como parte de Todo Lo Que Es, como una chispa divina?

El paradigma que usemos para definirnos especificará lo que encontremos.  Sin importar si estamos en la base o en la cima del sistema, si no despertamos a la realidad de que somos influenciados poderosamente por él, estamos en problemas.  Solo si nos conocemos y nos potenciamos como seres espirituales haciendo una experiencia humana, podremos liberarnos de los condicionamientos internos y externos y crear una vida plena.

Entonces, estaremos en paz y usaremos nuestra energía para elegir y concretar vivencias que nos ayuden a aprender, a ser creadores responsables, a disfrutar, a compartir con la Naturaleza, a agradecer cada día la maravilla de estar vivos en un mundo amable. Y, si surge lo que parece un problema, sepamos que es una oportunidad para expandirnos y cooperar.

Comparte:

2 comentarios

  1. ME ENCANTA ESTE SER HUMANO! ME ENCANTA ESTA MUJER! ME ENCANTA COMO ESCRIBES! COMO TE CONECTAS CON TU ESPIRITU Y NOS ALIMENTAS EL ALMA PARA SEGUIR CRECIENDO Y DESPERTANDO CADA DIA! BENDICIONES PARA TU ALMA!
    COMO ME GUSTARIA QUE VINIERAS A COMPARTIR UN POCO DE TU LUZ PATA MI PAIS! VENEZUELA!

    1. ¡Muchas gracias, María Luisa! Nos conectamos de alma a alma, sin importar los lugares en donde estemos. Nuestros jóvenes países están buscando su identidad (sin tener en cuenta las consecuencias de las decisiones, muchas veces), pero esparzamos Luz allí donde más se necesita. Te mando un luminoso abrazo, esperando que alguna vez nos podamos darnos uno en persona.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

captcha

Sobre Diseño Humano

No te pierdas ninguno.

Suscríbete al boletín semanal

Recibe un email semanal con consejos, reflexiones y recursos, directamente en tu casilla de correo.

Categorías

Sígueme