Estaba de visita en lo de una amiga y viene una sobrina de ella. Como me conoce y recibe el Boletín, enseguida me dice: “¡Qué genial lo de Diseño Humano! Lo busqué y ya sé todo”. Le hago un par de preguntas y, efectivamente “sabía”, lo había leído pero no lo había desarrollado ni personalizado; no lo había internalizado.
Como dicen por ahí: “Twitter te hace pensar que eres sabio, Instagram que eres fotógrafo y Facebook que tienes amigos”. Esta es la ilusión de Internet. Y se intensifica cuando creemos que, porque leemos mucho sobre algo, ya tenemos las soluciones. No, es solo información. Es un primer paso, pero si no lo incorporamos (hacemos carne) termina siendo una carga porque sabemos pero no es real en nuestra vida.
Si no está en el cuerpo, no está en ningún lado. Esa es una verdad. Solamente cuando forma parte de nuestra actitud, de la manera de procesar y vivir lo cotidiano podemos decir que es nuestro. A veces, es bueno buscar ayuda para lograrlo.
