¿Tiempos desperdiciados?

¿Y si lo miramos desde la perspectiva del Ser?

 

Muchas veces, creemos que “desperdiciamos” el tiempo porque no sucede nada; porque pasamos años en situaciones que luego calificamos como erradas o perniciosas; porque vivimos enojados, aburridos, sufrientes, dubitativos, sin rumbo o con rumbo dictado por otros; porque actuamos reactivamente (con lo aprendido, con lo que nos sale) en lugar de conscientemente; porque repetimos lo mismo sin parar.

bebe caminando

Nos castigamos por eso.  Duramente.  Indefinidamente.  ¿Y si lo miramos desde la perspectiva del Ser?  Es la misma de cuando un niño está aprendiendo a caminar, por ejemplo.  Se cae una y otra vez; se lastima; parece que arranca y se vuelve a desplomar; al final lo logra y quiere correr: se inicia otro ciclo de caídas y éxitos.  ¿Acaso levantamos al niño para que no se lesione y lo cargamos por el resto de su vida?  No, lo miramos con paciencia y cariño hasta que concluya su aprendizaje.  Eso hace nuestro Ser.  Sería bueno que comencemos a tratarnos amable y perseverantemente.

Comparte:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

captcha

Sobre Diseño Humano

No te pierdas ninguno.

Suscríbete al boletín semanal

Recibe un email semanal con consejos, reflexiones y recursos, directamente en tu casilla de correo.

Categorías

Sígueme