Esta fue la reacción de una consultante cuando analizábamos su Carta de Diseño Humano. Y es bastante normal: tenemos una visión muy distorsionada de quiénes somos. En parte, porque venimos con rasgos hereditarios, que son inconscientes, y que por ello no reconocemos; en parte, porque tenemos modelos internalizados, que no registran nuestro potencial, por lo que los desechamos; en parte, porque seguimos estrategias que no son las propias, por lo que caemos en los mismos errores una y otra vez; en parte… porque creemos que es imposible conocernos y que somos muy complicados… Y no es cierto.
Voy a dar algunos ejemplos para que tomes dimensión de cómo nos boicoteamos. Marisa vive frustrada porque quiere tener LA vocación que guíe su camino. Ha probado muchas cosas, pero no encuentra “eso”. No existe. Al no tener un Centro G Definido, irá haciendo distintos aprendizajes, tomando direcciones que le irán dando otros, y quizás encuentre algo o haga un combo que la haga sentir bien en algún momento. También, es un camaleón, que toma las personalidades de los demás, y eso está mal visto en la sociedad, así que tiene baja autoestima.
A Oscar siempre le ha interesado el dinero y progresar, pero vive con personas que no lo entienden, que creen que debe ser más “espiritual”. Sin embargo, les conviene que traiga recursos y se aprovechan, porque él se preocupa por la tribu. Oscar tiene un Centro del Ego Definido y un Canal de Ambición, por lo que está bien encaminado, pero los demás, en lugar de tomarlo como ejemplo para desarrollarse, desperdician esa ventaja y navegan en la escasez, como la mayoría de nosotros que lo tenemos Sin Definir.
Pedro es inseguro y miedoso. Mientras que otros se lanzan a la aventura sin más o se rodean de amigos para hacer cosas, él necesita investigar, comprender antes de realizar algo, ser su propia autoridad; luego, cuando se siente más sólido, lo pone en práctica, con muchos procesos de prueba y error. A veces, se llena de información y no sale de ahí, porque le atemoriza equivocarse. Es un Perfil 1/3, con un Centro de la Cabeza y un Ajna Sin Definir, así que corre el riesgo de eternizarse en desplegar opciones y no concretar.
Alicia también tiene los Centros mentales abiertos y vive “abriendo ventanitas”, ansiosa por cubrir todas las posibilidades que tiene alguna situación. Le cuesta decidir y termina metiéndose en cualquier actividad, solo para descargar la tensión y la enorme energía que tiene. Es una Generadora Manifestante, que no escucha su GPS, su Centro Sacral, así que su mente la gobierna y pierde oportunidades inmejorables, involucrada en asuntos de otros, solo porque no se hace caso.
María vive en una montaña rusa emocional: tiene días en los que se siente alegre, que puede lograr todo, que la vida le sonríe y otros en los que está melancólica, enojada, que es una basura y está estancada. Su pareja, Juan, no comprende estas fluctuaciones y trata de consolarla, ayudarla, se mimetiza con ella, pero es en vano… Ella tiene un Plexo Solar Definido y su frecuencia es la Ola Emocional, él no. Si no saben cómo funciona esta mecánica, seguirán peleándose, sin aprender nada.
Como verás, traemos un “mapa con herramientas” (como me dijo una consultante), pero lo desconocemos y terminamos yendo en contra de nosotros mismos. En lugar de simplificar y ser originales, siguiendo nuestras estrategias, anhelamos encajar, seguir el modelo, ser aceptados por lo que no somos, condicionados por las influencias que tomamos de los demás, incapaces de expandir nuestro potencial. ¡Qué pena!
Diseño Humano fue canalizado para ayudarnos en estos tiempos de transición. Nos describe fehacientemente y nos brinda recursos simples y prácticas para transitar por el sistema, sin engancharnos. Si sabemos cómo somos y cómo actuar, podemos fluir más fácilmente, fuera de las luchas y resistencias, para conectar con el Ser. Reconoce que estamos en una Matrix y que nuestro diseño es el Filtro a través del cual experimentamos la Conciencia y contribuimos a co-crear.
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