Observo en los medios y en las redes que los jóvenes básicamente se divierten a través de alcohol, drogas y sobreexposición en las redes (cuanto más, mejor). Las chicas aplauden a los chicos que se pelean y pegan, y bailan provocativamente para seducirlos (las feministas de principios de siglo se removerán en sus tumbas al verlo y escuchar las letras de moda: ¡tanto sufrimiento para esto!).
Cada tanto, surgen “desafíos” que los llevan a herirse. Los bloopers muestran muchísimos chicos que hacen tremendas tonterías para salir en las redes, a riesgo de quedar paralíticos o con secuelas para toda la vida. Quieren ser famosos sin importar la razón y, a la vez, tienen ídolos que confiesan que viven seriamente enfermos debido a la enorme presión que soportan.
Ya sé que hay una juventud que no se engancha de esto, pero me pregunto: ¿por qué lo que se muestra es tanta AUTODESTRUCCIÓN? ¿Cuál es nuestro papel como familia y sociedad? Visto los resultados, no estamos sabiendo gestionar un modelo que saque lo mejor de ellos, teniendo en cuenta que traen la mutación dentro de sus células y no encuentran espacios en donde vivirlo.