
Muchas veces, escucho personas (sobre todo mujeres) que pregonan que uno debe ocuparse de sí mismo para ser feliz, para estar completos, y luego cuentan como ejemplo que fueron a la peluquería o que se compraron un par de zapatos o que fueron de shopping con una amiga.

Eso sería la respuesta capitalista a esa cuestión: consume. Es como cuando alguien habla de ocio y dice que estuvo mirando series por horas o que se fue de tragos hasta emborracharse o que jugó con la Play.

No sabemos estar solos sin hacer nada. Eso sería ocuparse de uno, ociosamente. Observar, sin un punto de vista fijo. Mirar, sin pretender calificar. Percibir, lo que existe y sucede. Adentro y afuera. Pescar ese instante en que un destello de verdad surge. Perderse. Perder la estructura conocida para dejar paso a lo inefable.

Me cuesta inmensamente. Pero, a veces, ES.