A medida que nos acercamos al final del 2019, hay una intensidad creciente en el aire. Las emociones están más en la superficie. Muchas personas están siendo desafiadas a mantenerse lo suficientemente centradas como para evitar reaccionar de forma exagerada o saltar a un escenario que luego encontrarán problemático. Las tensiones relacionadas al manejo de una multitud de cosas a la vez pueden ser abrumadoras. Continúa leyendo para obtener la información básica y algunas herramientas simples para conducir las intensas olas con más facilidad y paz interior.
ANTECEDENTES
Si diciembre de este año te parece más difícil, no lo estás imaginando.
Las razones varían de persona a persona, sin embargo, la mayoría de nosotros estamos siendo impactados por cosas como las siguientes:
(1) el estado general inestable de nuestro mundo exterior
(2) el saber cuánto se necesita cambiar para que tengamos un planeta habitable y una sociedad global amorosa
(3) las preocupaciones, incluso si son inconscientes, acerca del clima y del futuro de la Tierra
(4) los ciclos de energía y el impacto de las mega conjunciones planetarias que están comenzando a afectar a cada uno de nosotros, ya sea que comprendamos o no la astrología
(5) nosotros como individuos estamos siendo catalizados en niveles internos, a veces sin advertirlo conscientemente, para hacer grandes cambios en la forma en que vivimos personalmente y operamos en el mundo
(6) el ritmo de todas las cosas se ha acelerado
(7) con tanto ahora viniendo hacia nosotros simultáneamente, podemos quedar empantanados por minucias y decisiones que antes eran más fáciles de manejar.
¿Te identificas con alguno de estos ejemplos?
Mientras tanto, a continuación hay algunos enfoques prácticos para donde estamos ahora – cosas que puedes implementar ahora y durante todo diciembre.
PREPÁRATE PARA LOS MEGA CAMBIOS DEL 2020
Aquí hay tres formas de comenzar a prepararse para los mega cambios de 2020 y finalizar el año en alza.
Primero: Haz un Balance de Ti Mismo y de Tu Vida.
Menciono esto primero, ya que es esencial para conocerte a ti mismo en un nivel más profundo y comenzar a intuir lo que necesitas cambiar en tu vida personal. Hacer un balance es como una revisión espiritual interna de uno mismo, desde la perspectiva de tu Ser Superior. Hay una tendencia en todos nosotros a ignorar la necesidad de cambiar los enfoques anticuados sobre nosotros mismos y sobre cómo estar en el mundo. Ese es nuestro condicionamiento basado en el ego. Irónicamente, estamos cableados a un nivel de ADN para cambiar y evolucionar. Al mismo tiempo, estamos condicionados a preferir la seguridad de lo que conocemos y creemos que podemos hacer o ser. Sugiero que entres en meditación, apagues tu mente pensante e invites energéticamente a la introspección sobre ti mismo. Sé audaz, atrevido e intrépido mientras miras dentro. No es para temer. De hecho, cuando hagas un balance descubrirás muchas cosas que te harán sonreír y te reconfortarán.
Segundo: Deshazte del Equipaje de los Patrones de ADN de Viejas Energías
Ahora es un excelente momento para evaluar y eliminar las viejas energías atascadas que, de lo contrario, pueden retenerte cuando ingresemos a la década del 2020. Es probable que muchas de ellas estén arraigadas a nivel del ADN en circunstancias pasadas, en la educación familiar, en patrones ancestrales, en vidas pasadas y en problemas que tu alma quiere que abordes en esta preciosa vida. A menos que estés entrenado para trabajar con el ADN, no serás capaz de verlos, ya que se encuentran ocultos en el subconsciente, y se catalizan para ser expresados cuando ocurren ciertos eventos de la vida.
Tercero: Renovación y Reabastecimiento
Antes de que finalice cualquier año, pero especialmente este, es vital contar con recursos energéticos para el año próximo. La renovación y la reposición pueden tomar muchas formas. Tu propio enfoque puede ser diferente al de los demás. Sintonízate con lo que más te refresque y te ayude a restablecer tus energías. Pregúntate antes de planificar unas vacaciones cómo puedes evitar el estrés a menudo típico que viene con las reuniones familiares, los viajes y tomarte un tiempo de inactividad. Se bueno contigo mismo. No tienes que decir “sí” a todo ni a todos. Recuérdate que eres amado y que mereces el espacio y el tiempo para reponer tu cuerpo y mente. De hecho, dale también a tu mente sobrepensante y sobreplanificadora unas vacaciones.
