Lionel Messi es un buen representante de la línea 5 en su Perfil de Diseño Humano. En él se proyecta al Salvador, al que dará las respuestas y las soluciones a las expectativas que le endilgamos. Puede ser abrumador (sobre todo si hay millones de personas haciéndolo, como en su caso). A un tono 5 se le pide todo y no se le perdona nada. Si no devuelve esas proyecciones con algo práctico y útil, que le sirva a los demás, será “quemado en la hoguera”, porque es el Hereje, el que rompe con lo tradicional y trae algo nuevo.