- Cambiar el concepto del YO. Cuando encaramos la energía del YO SOY enfocándonos en “qué hay para mí”, creamos separación en nuestras relaciones. Cuando partimos del YO como “lo que YO SOY lo comparto”, las cosas cambian. Claro, para llegar de un lado a otro hay mucho que sanar.
- Es un mes para monetizar nuestro proyecto. Marte en Tauro y varias alineaciones a Plutón en Capricornio nos ayudan.
- Para pensar antes de hablar. Gran parte del mes, Mercurio estará en Aries y sabemos que toda acción nace de un pensamiento. Con tan poco tiempo para pensar antes de actuar (así se siente), podemos reaccionar y discutir.
- Para hacer trabajo interno en torno a lo que deseamos, quiénes somos ahora, aceptar y apreciar nuestro crecimiento. También, para entender por qué competimos como mujeres, cómo la energía masculina nos limita la capacidad de recibir y temas similares. Venus empieza a retrogradar.
- Tener paciencia y calma en nuestras relaciones que, como ya venimos, estarán pasando por muchos cambios.
Mía Pinedo